Elegir ser libre, elegir estar completo

Wenders termina una de sus pelis con una frase que decia algo así:

En cada movimiento deshechamos otros movimientos.

Y en el movimiento de ayer desheche miles de los movimientos que habia construido semanas anteriores. Elegi volver a tener esos movimientos que me venian guiando tiempo atrás.

Y ahí estaba él, sentado mesa de por medio, enfrentandos una vez más. Tiempo atrás mi movimiento era sentarme a su lado, hoy mi/su movimiento era estar enfrentados.

Ahí estaba él, con discurso poco creible, que yo a gritos quería volver a creer.

Yo, quería encontrar esa magia que alguna vez me dio, queria saber donde se habia perdido, preguntarme y explicarme cada uno de mis/sus movimientos para encontrarla.

Pero por qué? Para què?

Eso es lo qué pregunto él:

_Para que estamos acá?

_Para que viniste acá?

Y yo fui para que me convenza, fui para intentar creerle, fui para que me despierte de ese maldito sueño que me hizo soñar. Quería encontrar ese abrazo que se habia diluido y se transformo en golpe. Pero no lo encontré.

Él en cambio, fue para escucharme....Él, fue, para escucharme.

Para hablar, de lo ya hablado.

Para teorizar y buscar hipotesis sobre nuestros movimientos. Para repreguntarse, para repreguntarme.

Y aúnque la magia no la encontre, no quise creerle al mundo, quise creerle a él, pero no le creí.

Aunque su cara me decía que si, su cuerpo me decia que no. Su voz, me decia que no.

Quería pensar que la cabeza le decía que NO pero el corazón le decia que SI.

Hace rato que solo creo lo que veo, solo creo lo que me dicen.

No te creo, aunque me encantaría creerte....