ambigüedad

Aprendi a no confiar en lo que estaba dado porque si. A mirar desde otra optica lo convencional. A preguntarme el como, donde y porque. Quise conocer y seguir descubriendo.
Pensar en porque lo normal era lo normal, quien lo habia definido y bajo que circunstancias.
Me enseñaron que los paradigmas cientificos siempre se derriban y llegan otros nuevos. Que nadie hace nada sin tener una razón y objetivo propuesto.
Que la religión era una simple construccion teorica para la logica de la economia. Que los fanatismos generaban miedos y encontraban pasivos. Que la revolucion se lleva en el corazón de los hombres y los hombres que pelean por ella, en realidad solo buscan paz.
Que no hay ricos y pobres sino que hay buenos y malos. Que la ideologia es un sublime aspecto de la vida retorica. Que las ideologias tienen historia y no son tan simples de exterminar en un presente.
Que el como, donde y porque me ha traido más dolores de cabeza que soluciones. Que luchar por eso que me parece digno y coherente puede llevarme al abismo de mi tolerancia psiquica.
Que no amo tan facil, porque engendro odios y no puedo continuar desde las mas inrtinsicas tensiones de la adaptacion a la sociedad. Que me enajeno, que repudio, que odio, pero que llevo la bandera de la paz y el amor lo más alto que pueda.
Que me inserto y me flagelo, que no tengo posibilidad de descanso, que estoy pero me voy. Que no puedo y me angustia.
Que la lucha es para unos pocos, que soy debil y no puedo. Que me rindo facilmente y que sobre todo sigo queriendo la paz y creyendo en el amor.

Más preguntas que respuestas

Tiempo atrás, decidí dejar de frecuentar aquellas viejas costumbres que no hacían más que dañarme enormemente. Fui descubriendo lentamente el placer de disfrutar de esas pequeñas cosas que la vida nos regala a diario y difícilmente podemos observar.
Aprendí que el color del cielo es mucho más que celeste, que algunos hombres luchan por sus sueños, por más pequeños que estos sean.
Que la mayoría de los genios son infelices. Que la verdad no es más que una simple construcción social. Que ese acuerdo social, hace regir la felicidad de algunos y la tristeza de muchos. Que los planos no son solo opuestos, que hay una extensa gama de colores entre el blanco y el negro.
Cada uno puede verse distinto según las ganas que tenga de cambiar, no siempre todo es para siempre y nunca se acaba el siempre de algunos.
En todos los momentos algo se puede aprender, de todas las personas algo te va a llegar y te demuestra que todavía SOS humano, que no estas tan lejos de aquella tarde de sábado con tus amigos.
Esa nave espacial que te viene a buscar todas las mañanas, es la misma que te devuelve cada tarde a tu cama, a tu cotidianidad. Cuando te levantas, te ves tan grande después de ese viaje, que es difícil entender como volves al día a día.
Te preguntás, cómo podes encontrarte desde el mas allá con aquellas almas que conociste en este sitio. En este que es común a todos, que no es lejano y que no se sabe hacia donde se va.
Ese que parece ser conocido pero que todavía te falta tanto camino recorrer, te falta conocer.
Y en los augurios de la soledad, encontras más preguntas que respuestas, porque esa nave no te deja descansar y así es el viaje. Te agotas y necesitas volver a descansar , pero en el fondo sabes cual es el lugar común que te va a estar esperando.

La pintura más perfecta

Laguna Sucia. Chalten

Agua color esmeralda.
Lagos que reflejan el cielo.
La verde vegetación se mezcla con la coloreada fauna.
La blancura del hielo apacigua la imponente montaña.
El pintor no pudo perfeccionar la exactitud del paisaje natural.
Es una fiesta para mis ojos y mi mente se deleita con el espectáculo visual.
Hasta la pintura más perfecta no podría transmitir el encanto de este momento.

El sol cae, Cabo Polonio

Pablo fue al mar.
En su rancho de madera pensaba en ella.
Por más que dejase atrás la ciudad, seguía atado al olor de su cuerpo.
Sabía que hacía lo mejor.
Pero, de pronto, se encontró en la misma mesa en la que un año atrás cenaban juntos.
Era la misma playa, en la que los dos corrieron de la mano hacía el mar. El mar, que él le enseño y que ella empezaba a descubrir.
Ella, se llama Abril y está en Montevideo con su mamá.
Su papá, Pablo, la recuerda sentado en la arena frente al mar.

Desde la inmensa rutina

Bajo esa inmensa rutina, esa que te hace despertar cada mañana en el mismo lugar.
Cada momento que tiende a repetirse continuamente, como si fuera un fluido constante que no se puede cortar. Pero sì! Si lo podemos cortar. Todavía podemos decidir nuestro mañana. Podemos pensar en nuestro presente. No todo esta “tan” configurado.
Los esquemas se rompen, las barreras se quiebran. Lo viejo suena joven y los continuos se transforman en micro partículas chiquititas que se despliegan como opciones para elegir, para evaluar y para analizar.
Nadie sabe cómo será su mañana, nadie quiere arriesgarse a saberlo. Todos tienen posibilidad de modificarlo. Todos quieren ver un nuevo esquema para formar algo que no este escrito, algo que cada uno pueda escribir.

Ciudad del cielo

Dos pequeños campesinos, de los pueblos más rivales del continente, se habían amado. Ese fue el peor de los pecados que pudieron cometer en toda su vida.
Tras ese acto tan puro como es el amor, los niños se habían ganado el odio de ambas familias, el desprecio de los seres que ellos más querían y la ira de todos los dioses. Ellos trataron de ocultarlo, pero su felicidad supero al miedo.
El dios de la tierra los encontró una mañana en una montaña de pasto seco.
Sin darles opción a escapar, el dios del viento los llevo a la ciudad del cielo, conduciéndolos rápidamente a su crucifixión.
En aquella ciudad se llamaron a reunión a los dioses más importantes para debatir el asunto. Algunos opinaban que lo más conveniente era cortarles las manos, para que no se pudieran tocar. Otros, querían dejarlos ciegos dándoles una poción de absoluto poder así no se podrían ver.
Allí estaban todos los dioses, quienes los juzgaron y decidieron por ellos. Querían separarlos pensando que ese sería el peor de los castigos.
Alguno llego a decir que sería necesario sacarles el corazón para que no sientan cariño el uno por el otro.
El dios del mar propuso separar los mares para que cada uno quede en una lugar diferente y no puedan volver a abrazarse.
El dios del sol pensó en extender sus rayos y propagarlos perpetuamente en una de las ciudades para que sea día eterno y en la otra solamente el cielo azul de la noche.
Todos tenían una hipótesis que querían hacer validar y poner a prueba para que concluya el amor entre esos seres prohibidos.
Pero nadie pensaba en que les pasaba a ellos, si no en lo que se debía y en lo que no se debía hacer.
Los dioses continuaban bebiendo vino blanco en copas plateadas y discutiendo en una larga mesa sobre el futuro de los campesinos.
Entre tanto debate, perdieron de vista a los cautivos. Quienes felices por haber hecho lo que sentían pudieron seguir amándose entre risas y miradas, sin importarles la decisión que tomaran los dioses para su final.

Quisiera ser tonta

Quisiera ser tonta, pero quisiera ser bien tonta. Quisiera ser tan tonta que no me de cuenta que los demas sepan que soy tonta.
Quisiera ser como las tontas que no se preocupan por nada, que su màximo anhelo es su belleza y por ser tontas se creen bellas, sin saber si realmente lo son.
Esas tontas que no se preguntan, que no reflexionan, que no se reprimen, que no se cuestionan.
Que no les importa la visiòn del otro, que no quieren nutrir su alma, ni llenar su cerebro, que no quieren estar informadas y que su memoria solo retiene lo de hace 2 segundos atras.
Quisiera ser tonta, linda y tonta. Tener un señor que me recuerde lo tonta que soy todos los dìas, que me lo haga saber, pero no darme cuenta, porque seria tonta.
Quisiera ser tonta, mostrarme desnuda en las pàginas de todas las revistas y los programas de TV y que no piense màs que en mi cuerpo. Pero que no me vuelva obsesiva pensando en: si mis siliconas estan bien o mal hechas.... Confiar, en que: si mi cirujano me dice que soy la mujer màs bella del paìs es cierto, no dudarlo ni un segundo, no desconfiar, no preguntarme si parezco un ejemplar de zoologico o si van a trasladarme algùn museo para mostrar las deformidades que la ciencia le hace a la naturaleza.
Ser tonta para confiar en el amor, para creer en absolutamente todo lo que se cruce por mis narices.
No querer irme màs que a la esquina, porque asì, todo estaria bajo control. Y ni siquiera reflexionar o preocuparme por si las cosas estàn o no controladas.
Vivir consumiendo tv o novelas de poca monta, donde lo ùnico que me preocupe sea tener una linda cartera para salir de noche.
No preocuparme por nada màs que por mi, sin tener tampoco bastante preocupacion por mi. Pensar en fàcil, no ver las complejidades que se me puedan presentar.
Ser tonta, tomar un cafe, hablar de mi, nada màs que de mi y tal vez de algùn chusmerio de una vedettonga de turno. Nada de chusmerio for export, quiero ser la màs tonta, la màs mediocre.
Quiero no tener sueños màs que los obligados por la sociedad. Quiero amar a Tinelli y ser una de sus bailarinas, quiero no entender cuando me hablan en dificil, quiero cambiar mi lèxico, quiero ser chata en mis comentarios, tan chata que cuando los demas se rian piense que lo hacen porque les gusto y no porque realmente soy tonta.
Quiero no haber leìdo a Freud, Lacan, Althusser, Marx, Pierce y otro par de hijos de putas que me cagaron la vida.
Quiero ser vulgar, la màs vulgar, quiero que mis vacaciones sean de por vida en San Bernardo y como muy loco, un paseo a Villa Gesell.
Quiero no darme cuenta de nada y ser feliz, quiero ser una tonta contenta.
Quiero pero no puedo.
Si alguien tiene el telèfono del Dr. de "El eterno resplandor de una mente sin recuerdo" me lo pasa?... quizàs puedo configurar mis ultimos 20 años de alguna otra manera.
Quisiera ser tonta para ser màs feliz, ser màs feliz siento tonta.

Fontanarrosa post mortum

Me preguntaba por las relaciones humanas.
El otro dìa al enterarme que la mujer del Negro Fontanarrosa, queria publicar cosas ineditas de èl, con derechos que le pertenecian al hijo pero que al ser ella la editora se quedaria con todas las regalias; Me preguntè por las relaciones humanas...
Y entonces reflexionaba: Si 1 un tipo como el Negro (por quièn me saco el sombrero y no dejo de sencibilizarme en cada una de las lìneas que leo de su increible literatura) elije a una mujer de la clase media alta o acomodada de Rosario. Casada en anteriores nupcias con un señor acomodado y de ideologia de derecha, por su puesto. Que realiza un giro en su vida y comienza a nutrirse de adultos bohemios en el famoso bar rosarino "El Cairo", tras su paso por la universidad. Que crea un centro educativo, una institucion donde dictan cursos y algo màs. Ese tipo de mujer, de mas de 40, con 3 hijos rugbiers, abogados y por esos estilos de perfiles socioculturales.
Esa señora, quien ha conocido las glorias al estar a su lado, quien ha disfrutado de su poesia y sus amistades, quien ha tenido el reconocimiento del resto por ser la esposa de. Quièn tuvo màs de lo que jamas habia pensado. Quièn estuvo a su lado cuando ya el cuerpo del Negro no respondia a su cabeza que seguia comandando, quièn lo acompañò en los momentos màs duros de su despedida, quien vivio la enfermedad y la tristeza, quièn lloro por la perdida y la memoria.
Ella, esta misma señora, hoy quiere editar su obra. Y la cultura nacional y popular estaria agradecida, sino fuera, porque esa señora lo que quiere es diversificar esas ganancias post mortum que el Negro puede seguir generando. Esas ganancias, que el Negro claramente establecio hasta que año correspondian a su hijo y desde que año corresponderian a Gabi.
Gabi, se confunde, Gabi podria haber hecho algo mejor.
Y me pregunto: Còmo el Negro se pudo enamorar de Gabi?